Vinieron a buscar un futuro mejor y encontraron la muerte, puede parecer un titular sensacionalista, nadie ha dicho que no lo fuera, pero resume a la perfección la tragedia que vivieron 15 subsaharianos que quisieron entrar en nuestras costas. El sábado nos despertábamos con la noticia, se localizaban dos nuevos cadáveres de subsaharianos en dos playas de Ceuta. Se ponía de nuevo sobre la palestra la actuación de la Guardia Civil ¿Habían cumplido con su deber o se habían excedido en la fuerza siendo parte responsables de la muertes?
Los hechos ocurrieron hace ya días, el 6 de febrero en la frontera de Ceuta, según los medios, al menos 250 subsaharianos intentaron entrar a nado en la ciudad autónoma después de haber probado previamente por tierra. Tras los dimes y dirites, finalmente Jorge Fernández Díaz, Ministro del Interior, reconoció que la Guardia Civil disparó pelotas de goma al agua mientras los inmigrantes intentaban entrar en España.
Para muchas ONG y colectivos en defensa de los derechos humanos estas actuaciones podrían haber sido el motivo de la muerte de estos inmigrantes. Para estas fuentes las pelotas, los disparos de fogueo y el miedo y ansiedad que generaron pudieron contribuir a que se ahogaran.
La responsabilidad no está clara y por eso el PSOE solicitará hoy mismo en el Congreso de los Diputados las grabaciones íntegras de la tragedia de Ceuta. En este sentido desde la oposición piden la dimisión o el cese del director de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, y del delegado del Gobierno en Ceuta, Francisco Antonio González.
La pregunta es: ¿Fue responsable la Guardia Civil de la muerte de 15 subsaharianos a las puertas de nuestra frontera?
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